Abro de nuevo el armario de mis historias... saco la pluma del cajón... y remuevo entre mis papeles para encontrar uno en blanco al que le interesen de nuevo mis pensamientos. Encuentro muchas cosas que me alegra volver a ver de nuevo... y también muchas otras a las que preferiría no volver a ver. Ahí estais vosotros... los de siempre... y gracias al cielo que continuais a mi lado y que no habéis cambiado. Pero también las preocupaciones, las tristezas, las lágrimas... y lo peor de todo, la rutina.
Una nueva vida se atisba al fondo del armario... o quizás sea mi vida de siempre que quedó enterrada y olvidada ahí hace unos meses y que ahora debo recuperar.
Ahora queda lo más difícil de encontrar... las palabras adecuadas que puedan explicarte y explicarme por qué me cuesta tanto empezar de nuevo. Tal vez sea porque este sueño ha durado tanto que me resisto a despertar. Realmente, no ha sido un verano corriente, pues no es algo normal encontrar una ocupación echa a tu medida y también a treinta personas echas a tu medida. No menosprecio mi vida real. Al contrario, la valoro mucho más ahora que la he recuperado. Pero despertar de golpe ha sido duro y aún no me acostumbro. Lo mejor de todo será cuando consiga darme cuenta de que no ha sido sueño, sino realidad... aunque, paradójicamente, ni yo misma distinga cada cosa, a pesar de todas las vueltas que le hemos dado al "temita" este verano.
Vuelve mi vida, vuelven mis sueños y vuelven mis palabras a este mi pequeño rincón de historias. Quizás algún día vuelva a desaparecer... si lo hago, ya sabéis donde buscarme: en Polonia, sobre un hipogrifo, buscando venganza y recitando "La vida es sueño" de Calderón en algún pueblecito perdido de La Mancha... preguntad por Rosaura.
¿Qué es la vida? Un frenesí
¿Qué es la vida? Una ilusión
Una sombra, una ficción
Y el mayor bien es pequeño
Que toda la vida es sueño
Y los sueños, sueños son
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